Hoy en día, como Iglesia portadora de las Buenas Nuevas, necesitamos humillarnos y clamar para ver la mano sobrenatural de Dios moverse a favor de los que sufren. Jamás nos conformemos con menos.
—Carlos Annacondia
Carlos Annacondia está casado con María, y tiene nueve hijos y quince nietos.
El 19 de mayo de 1979 entregó su vida a Jesús. A partir de ese momento, una pasión por predicar el Evangelio cautivó su corazón hasta el día de hoy.
En el año 1981 comenzó su ministerio como evangelista, predicando el mensaje de Jesucristo en las villas de emergencia del Gran Buenos Aires. En la actualidad, ha recorrido muchos países llevando el mensaje que transformó su vida y la de su familia.