Muchas personas, al ver una sotana necesitan expresar algo que no saben lo que es. No se sabe si es extrañeza, curiosidad, desconcierto, o necesidad de saber que Dios existe, pero mucha gente te dice algo, sobre todo en las ciudades o en los centros comerciales. Entiendo a los que no van vestidos de sacerdotes porque se han cansado de ser monos de feria, o de que la gente los pare por la calle, pero creo que todavía una sotana habla de Dios, haciendo posible que muchas personas dibujen una sonrisa y te feliciten por la calle o te besen la mano pidiendo una oración. Su corazón se eleva a Dios, como antes, como siempre. También hay muchos que insultan, quizás cada vez más, pero no pasa nada porque a uno le insulten de vez en cuando.
El Padre Antonio María nació en Barcelona el día 24 de octubre de 1977. Sus padres lo bautizaron a la semana con el nombre de Antonio María, en honor a San Antonio María Claret por la devoción que le tenían, siendo por ello sus iniciales, las ignacianas: A.M.D.G.