“Oh, Santo Edwiges, Tú que en la tierra fuiste la protección de los pobres, la ayuda de los desfavorecidos y la ayuda de los endeudados, en el Cielo ahora disfrutas del premio eterno de caridad que has practicado en la vida, suplicante. Obtengo de Dios la ayuda que necesito con urgencia ... (haga su pedido) San Edwiges, protector de los endeudados, aumenta mi confianza en la divina providencia para que no falte el pan de cada día, y que a fin de mes no falte lo necesario, para que puedo darle a mi familia salud, educación y dignidad en la vivienda. Saint Edwiges intercedió por mí para que pueda lograr un equilibrio en la vida financiera y el discernimiento en los negocios. Ayúdame a superar problemas financieros, que no me engañe con dinero fácil, que no conspire con corrupción, sobornos. Dar balance en la vida financiera. También entrégame a mí, Saint Edwiges, la gracia suprema de la salvación eterna. San Edwiges, ruega por nosotros. Amén "