Como juego de sabiduría tradicional de confrontación para dos jugadores con una larga historia, el ajedrez tiene una dificultad moderada y es adecuado tanto para hombres como para mujeres, viejos y jóvenes, tanto en el país como en el extranjero. En una partida de ajedrez, el ataque y la defensa, la virtualidad y la realidad, el todo y la parte son intrincados.