Desciende a las profundidades abisales de una dimensión macabra, donde habitan grotescos monigotes. Canaliza el inmenso poder de la mano colosal de una deidad sobrenatural, un instrumento de ira cósmica. Sumérgete en un frenesí etéreo, donde la cordura se deshilacha y la línea entre la realidad y la pesadilla se desdibuja. Desata tu bofetada divina sobre los desafortunados monigotes, invocando el terror y tejiendo un tapiz de pesadilla primordial.