Nace de la pasión y experiencia culinaria de dos hermanos que querían combinar el placer de comer con la búsqueda continua de la calidad y la bondad culinaria. A través de una cuidadosa y personal selección de materias primas y técnicas de elaboración, ofrecen un producto de alta calidad, creyendo firmemente en la destreza manual de su trabajo, siguiendo y conociendo en profundidad la cadena de suministro de los productos individuales utilizados en el laboratorio.
El placer de comer bien está en constante evolución, por eso Frumento colabora con reconocidos chefs en la búsqueda del mejor encuentro entre los sabores de antaño y la creatividad culinaria moderna.