Las enseñanzas de Buda se han transmitido de generación en generación en Myanmar durante más de 2500 años. Ahora es nuestra responsabilidad continuar este legado apoyando a nuestros profesores de meditación y sus centros de estudio y meditación.
Con tu apoyo, AGGA DANA ha trabajado continuamente para mejorar la calidad de vida en los Centros de Meditación Panditarama. Las donaciones de donantes internacionales nos han ayudado a garantizar que haya agua potable, alimentación y nutrición adecuadas, higiene de cocina satisfactoria e infraestructura moderna dentro del centro. Mantener altos estándares internacionales nos ayuda a garantizar que los yoguis estén sanos y puedan practicar intensivamente en un entorno seguro y de apoyo.
A medida que la economía de Myanmar continúa deteriorándose, los ingresos y los medios de vida de la población se han visto afectados. Como resultado, las donaciones a los monasterios se han reducido significativamente. Sus generosas donaciones son vitales.
Todas las donaciones que recibimos van directamente a ayudar a satisfacer las necesidades de Panditarama y los centros de meditación y monasterios asociados en Myanmar. Los voluntarios de AGGA DANA ofrecen gratuitamente muchas horas de servicio, agradecidos por la oportunidad de apoyar a estos preciosos maestros budistas y centros de meditación.