Al crecer, recuerdo los viajes por carretera para visitar a la familia o ir de vacaciones. Mi hermano pequeño y yo nos sentábamos en la parte trasera de un automóvil por lo que solo puedo asumir que fue una eternidad. Durante esas largas décadas de viajes, mi hermano y yo encontrábamos formas de entretenernos. Jugábamos tres en raya u otros juegos durante horas. Esta es una recreación de esa experiencia simplista. Sin WiFi, sin gráficos sofisticados. Solo un juego por turnos entre amigos y familiares. Un poco de diversión sobre la marcha, dondequiera que vayas.