Shaun, un empleado de una tienda de electrónicos que en la mayor parte de su tiempo libre, se la vive en el bar local tomándose pintas de cerveza con su compañero de cuarto, Ed, la vida de Shaun parece estarse desmoronando cuando su novia, Liz, lo bota y su padrastro, Philip, aparece para reclamarle por no cuidar a su madre, Barbara, especialmente desde que se le olvidó mandarle flores en su cumpleaños. Las cosas dan un giro para lo peor, cuando los muertos regresan para devorarse a toda Inglaterra, todo está en manos de Shaun de mantenerse en postura y probarse a si mismo de una vez por todas, rescatando a Liz y su mamá. Con su fiel compañero a su lado, nada, ni siquiera los muertos vivientes, podrán ponerse entre Shaun y las dos mujeres de su vida.