Shannon sale de escapada por la montaña para esparcir las cenizas de su padre pero, una vez allí, ve cómo una agente de policía mata a un traficante de drogas tras una discusión. La agente la persigue y pide refuerzos a su primo y a su tío, otros dos policías corruptos. La atrapan y están a punto de matarla cuando Jack (Bruce Willis), que es un policía de Cincinnati recientemente retirado, que se ha ido de fin de semana a una cabaña cercana, lo oye todo y la salva. Juntos, Jack y Shannon, tienen que enfrentarse a los policías corruptos y conseguir pruebas suficientes para poder incriminarlos.