La tía Danielle supuestamente tiene problemas de salud, pero en realidad solo es una anciana amargada y desagradable. Vive con una cuidadora, pero cuando ésta muere al caer por una escalera, Danielle se muda a París con su sobrino nieto y su familia. Allí continúa usando su maldad para manipular a todo el mundo y para que hagan las cosas a su manera.