Ambientada en el Detroit de los años 80, en pleno apogeo de la epidemia del crack y la guerra contra las drogas, White Boy Rick está basada en la conmovedora historia real de un padre obrero (Matthew McConaughey) y su hijo adolescente, Rick Wershe Jr. (Richie Merritt), quien tras convertirse en informante encubierto de la policía y luego en un traficante de drogas, acabo siendo abandonado por sus protectores y condenado a cadena perpetua.