Aquí encontrarás diminutos duendes, espíritus de los árboles que manejan la vida, elfos corruptos, semiorcos salvajes, ágiles duendes de las plantas y poderosos dragones que dominan los elementos de hielo y fuego.
Duendes: estas criaturas son pequeñas de estatura y, a menudo, traviesas. Poseen astucia y agilidad, lo que los hace expertos en emboscadas y escapes rápidos.
- Espíritus de los árboles: maestros de la fuerza vital, estos seres etéreos están estrechamente conectados con la naturaleza. Pueden manipular plantas, curar heridas y comunicarse con la flora que los rodea.
- Elfos corruptos: una vez nobles y elegantes, estos elfos han caído en desgracia y han abrazado la oscuridad. Son expertos en magia oscura y pueden ser astutos y traicioneros.
- Semiorcos: combinando la fuerza y la resistencia de los orcos con algunos rasgos humanos, los semiorcos son guerreros formidables. Se destacan en el combate físico y poseen una naturaleza salvaje e indómita.
- Dragones: estos majestuosos seres son venerados por su inmenso poder y sabiduría. Dirigen las fuerzas de hielo y fuego, son capaces de desatar devastadores ataques elementales y poseen una longevidad increíble.