Tú (Rojo) y tu despiadado oponente (Azul) se turnan para cortar las ramas de un arbusto que coincida con tu color respectivo. Las ramas que no están conectadas al suelo caen naturalmente y desaparecen del juego. ¡El último en hacer un movimiento gana!
Estas reglas simples conforman el clásico de la teoría de juegos combinatorios que es Red-Blue-Hackenbush. La implementación que estás viendo te permite jugar algunos niveles, contra una computadora o con un amigo. (También es posible jugar con un demonio)