Ser madre es una experiencia maravillosa, pero también puede hacer que te sientas cansada, agotada y con barriga después del embarazo. Sin embargo, no tienes por qué dejar que la maternidad se apodere de tu rutina de ejercicios. Aquí tienes algunos ejercicios posparto que te ayudarán a recuperar la forma y a sentirte segura de ti misma.
El yoga es una excelente opción de entrenamiento para las madres recientes. No sólo ayuda a perder peso, sino que también favorece la flexibilidad y el alivio del estrés. Empieza con posturas suaves como la vaca-gato, el perro mirando hacia abajo y el guerrero dos. A medida que vaya progresando, puede aumentar gradualmente la dificultad de las posturas. El yoga es también una forma excelente de trabajar los músculos abdominales, ayudándote a tonificar el vientre después del embarazo.
El pilates es otra excelente opción de entrenamiento posparto que puede ayudarte a recuperar la forma. Es de bajo impacto, lo que significa que es suave para las articulaciones y puede ayudarte a evitar lesiones. El pilates puede ayudarte a fortalecerte, mejorar la postura y reducir el estrés. Algunos ejercicios populares de pilates son la inclinación pélvica, la almeja y el puente. A medida que te fortalezcas, puedes aumentar la dificultad de los ejercicios.
El ejercicio cardiovascular es una parte importante de cualquier rutina de fitness, y los entrenamientos posparto no son una excepción. Puedes empezar con actividades suaves como caminar, nadar o montar en bicicleta. A medida que te pongas más fuerte, puedes aumentar la intensidad de tus ejercicios de cardio. El cardio puede ayudarte a perder peso, mejorar tu salud cardiovascular y aumentar tus niveles de energía.
Junto con el ejercicio, la dieta y la hidratación desempeñan un papel importante en la pérdida de peso posparto. Intenta seguir una dieta equilibrada que incluya mucha fruta y verdura, cereales integrales y proteínas magras. Bebe mucha agua para mantenerte hidratada y evita los alimentos procesados y las bebidas azucaradas.
Ser madre no significa que tengas que renunciar a tu rutina de ejercicios. Con los ejercicios postnatales adecuados y una dieta equilibrada, puedes volver a ponerte en forma, perder peso y sentirte segura de ti misma. Así que, tanto si prefieres el yoga como el pilates o el cardio, ponte en marcha y empieza a sentirte lo mejor posible.