Los acertijos nos han sido familiares desde la infancia, y no debemos negar a nuestros hijos el conocimiento del mundo a través de un ejemplo de arte popular.
Los acertijos no solo desarrollan lógica e ingenio, sino que también enseñan a notar similitudes y diferencias donde hay muy pocos de ellos. Hazlos a tus hijos y resuélvelos tú mismo.
¡Espero que esta divertida aplicación de juego te permita disfrutar de este proceso!