Para asegurarse de que un auricular personalizado para protección auditiva muestre un comportamiento óptimo, se puede realizar una prueba de fugas rápida.
Una prueba adecuada proporciona certeza sobre un ajuste perfecto del auricular. Cuando hay un ajuste perfecto, el ruido solo puede ingresar al canal auditivo a través del filtro de ruido y no fuera del auricular.
Para ello, el espacio del canal auditivo, entre el tímpano y el otoplástico, se lleva a una pequeña sobrepresión de 5 mB (0,073 psi), mediante aire.
Cuando se alcanza la presión, el sistema de aire se cierra y cuando la presión se mantiene estable durante cinco segundos el otoplástico tiene el ajuste perfecto. El software relacionado controla el comprobador de auriculares y permite al usuario analizar el curso de la presión, en tiempo real, por medio de un gráfico.
Presión de prueba: 5 mB (≡ 51 mm H2O de 500 Pa)
Presión de disparo: <4 mB
Tiempo de prueba: 5 segundos.
Duración de la prueba: máx. 10 segundos
Bluetooth®: versión 2.1 (min.), Clase 2 (10 m)