Éste es un libro profundo y a la vez sencillo, que debe leerse con detenimiento y oración. En una época en que los cimientos de la autoridad corren peligro de desmoronarse en la iglesia, en el hogar, en la sociedad y en otros aspectos de la vida en general, el autor nos ofrece consejos y enseñanzas que podrán ser norte y guía en nuestra vida. "Que vuestra autoridad no exceda vuestro ministerio", nos aconseja Watchman Nee en una de sus páginas.
Watchaman Nee se convirtió al cristianismo en China a la edad de diecisiete años y comenzó a escribir en el mismo año. A través de casi treinta años de ministerio se evidenció como un don único del Señor para su iglesia en ese tiempo. En 1952 fue hecho prisionero por su fe y permaneció en prisión hasta su muerte en 1972. Sus palabras permanecen como una fuente de abundante revelación espiritual para los cristianos de todo el mundo.