Sergio Ramírez, premio Cervantes 2017, regresa al género negro con Ya nadie llora por mí.
Corrupción y tramas de poder en un caso policial en el que nadie es del todo inocente.
El inspector Dolores Morales está dado de baja en la Policía Nacional desde hace años y ahora trabaja como investigador privado. La mayoría de sus casos son adulterios de una clientela de pocos recursos. Pero un encargo va a sacarlo de la rutina: la desaparición de la hija de un millonario.
Pronto el caso se revela como la punta de un iceberg en el que toman forma la corrupción y el abuso de poder que subyace en el discurso revolucionario de la Nicaragua contemporánea.
Sergio Ramírez (Masatepe, Nicaragua, 1942). Ganador del Premio Alfaguara de Novela 1998 con Margarita, está linda la mar y galardonado con el Premio Cervantes 2017. Es parte de la generación de escritores que surgió después del boom; tras un largo exilio voluntario en Costa Rica y Alemania, abandonó por un tiempo su carrera literaria para incorporarse a la revolución sandinista que derrocó la dictadura del último Somoza. Formó parte de la dirección del nuevo gobierno, del que llegó a ser vicepresidente en 1985. Reemprendió la escritura con la novela Castigo divino (Alfaguara, 1988), Premio Dashiel Hammett. Un baile de máscaras (Alfagura, 1995) ganó el Premio Laure Bataillon a la mejor novela extranjera traducida en Francia en 1998. Alfaguara también ha publicado sus Cuentos completos (1998), los volúmenes de cuentos Catalina y Catalina (2001) y El reino animal (2006); así como las novelas Sombras nada más (2002), Mil y una muertes (2005), y sus memorias de la revolución, Adiós muchachos (1999). Sus libros han sido traducidos a más de 15 idiomas.