La princesa de Babilonia vive en un mundo en el cual la realidad se confunde con la magia y el presente se une al pasado; protagonista de una magistral farsa, donde la ironía y el cinismo de Voltaire aparecen disfrazados por el fascinante escenario oriental de Las mil y una noches. Pero tras el mítico esplendor de los unicornios y los fastuosos jardines de Babilonia surge la triste realidad del presente histórico y social de la Europa del siglo XVIII, una realidad que sólo el genio del gran escritor francés fue capaz de transformar en fábula.