Las pistas comienzan a aparecer, los testigos que hablan a pesar del miedo, y mientras en las sombras acecha un sistema interesado en que no se haga justicia, Pitic se involucra emocionalmente con Raquel, mamá de una niña que sobrevivió con la mitad de su cuerpo desfigurado por las llamas.
Con maestría y sin piedad, Imanol Caneyada sacude nuestras conciencias con esta ficción detectivesca anclada en nuestro pasado reciente y nos mete en la piel de las víctimas --hijos y padres-- de tan inmensa tragedia, la peor en un México que desborda de ellas. 49 cruces blancas es sin duda una novela negra... tan negra como la realidad.
"Llevo cuarenta años leyendo novela policiaca, y de lo que está produciéndose en México, lo más interesante son las novelas de Imanol Caneyada."
Paco Ignacio Taibo II