Este es un atrevido ensayo sobre el lenguaje de los españoles de hoy, sus aciertosexpresivos, sus modas y sus disparates. Se explora el eje afectivo de las palabras (entre la admiración y el desprecio) que sirve para interpretar tantas situaciones. Se analiza la retórica vana de algunos hombres públicos, especialmente del estrato semiculto. Se concreta en dos fenómenos llamativos: el politiqués (el peculiar dialecto de los políticos) y el tertulianés (las artimañas dialécticas de los tertulianos de la radio o la tele).
El libro es crítico en la intención, polémico por naturaleza y, al final, divertido. Puede servir también como estímulo para sacar todo el partido posible a la lengua española culta y a la coloquial.