Bruja Blanca: Rituales de limpieza, sanación y abundancia

Círculo de Hechiceras Urbanas

Jan 2022 · Pampia Grupo Editor

Tentang eBook ini

Hasta no hace mucho tiempo al escuchar la palabra "bruja" se nos representaba inmediatamente a una mujer de feos rasgos, desgarbada y maléfica que habitaba en oscuros bosques. Mucho se ha tardado en aceptar el verdadero significado de la palabra "witch" (bruja en inglés) "mujer sabia que ayuda a otras personas". En la actualidad estas mujeres de probada sabiduría, poseedoras de mágicos poderes que no dudan en compartir saberes y experiencias del orden de lo mágico, lo esotérico y lo sanador, ven revalorizada su figura. Algunas de ellas vienen heredando poderes desde hace varias generaciones, otras están aprendiendo y practicando sin que aún se hayan despertado sus poderes mágicos. Hoy existen nuevas disciplinas que mueven energías, es por ello que esta sabiduría ancestral de la brujería complementa la herencia sagrada con el aprendizaje actual en perfecta armonía con los objetivos de siempre, ponerlas al servicio personal y de quienes las necesitan. No se honra culto a imágenes ni personas, se valora todo tipo de vida y se aboga por una convivencia en paz con todo lo que nos rodea, seres vivientes y los cuatro elementos. "En las tierras solitarias no halladas por los hombres, las mujeres entre el verde umbroso y los seres del bosque que viven invisibles. Cumplidas las fiestas rojas y sangrientas, mantenidas las llamas de la Gran Madre, soy libre y sacerdote de Baco, vestida de puro blanco, nací limpia del vil nacimiento del hombre, y desterré de mis labios todo alimento con vida" (Eurípides, Las bacantes).

Tentang pengarang

"El Círculo de Hechiceras Urbanas es una reunión de mujeres con poderes mágicos que están en contacto permanente (a veces de manera virtual y otras, con reuniones presenciales) para compartir saberes y experiencias del orden de lo mágico, lo esotérico y lo sanador. En nuestro caso, la palabra 'círculo' tiene, al menos, dos significados. Por un lado, el de reunión o asociación de personas que comparten intereses en común. Pero, por otro, también está la idea de círculo en tanto forma redonda, curva y flexible, configuración privilegiada de lo femenino, por oposición a lo masculino que tiende a ser recto y rígido. Nuestras edades son de lo más diversas. Como exigimos mayoría de edad para formar parte de él, contamos con jóvenes de 18 años, pero también tenemos el enorme privilegio de engrosar nuestras filas con brujas de más de 80 años, verdaderos tesoros. Entre ambos extremos, todas las décadas de la vida se encuentran representadas en nuestro círculo mágico y sagrado. Algunas de nosotras venimos heredando poderes desde hace varias generaciones, otras vivimos aprendiendo y practicando sin que aún se hayan despertado en verdad nuestros poderes mágicos, y la mayoría tenemos el privilegio de estar en los grupos: hemos heredado poderes y, además, no hemos dejado de ponerlos en práctica ni de estar al tanto de las nuevas disciplinas que mueven energías, de modo tal de sumar lo moderno a lo antiguo y ancestral, de complementar la herencia sagrada con el aprendizaje actual. Habitamos una gran urbe, la ciudad de Buenos Aires, y sus alrededores pero, gracias a la tecnología actual, estamos en constante contacto e intercambios con hechiceras del interior del país. Asimismo, también nos relacionamos con hermanas latinoamericanas, sobre todo, de México y Colombia. No nos faltan tampoco fraternas relaciones en España, Italia, Reino Unido y Alemania, donde nos vinculamos muy especialmente con parientes pertenecientes a nuestra familia de origen que tienen la fortuna de también ser depositarias del legado de los poderes mágicos. El Círculo de Hechiceras Urbanas se mantiene en total secreto y anonimato, y no efectúa apariciones públicas. Además de brujas, somos madres, esposas, hijas y hermanas, y no deseamos involucrar a nuestros seres queridos en la misión que hemos decidido llevar a cabo juntas. Por otro lado, muchas de nosotras tenemos nuestros empleos y profesiones que en nada se relacionan con la sabiduría ancestral de la brujería y somos plenamente conscientes de que nuestras prácticas tal vez no serían bien aceptadas por muchos de quienes confían en nuestros procederes laborales y profesionales. Pero, sobre todo, consideramos que ese anonimato está en perfecta armonía con nuestros objetivos: no nos reunimos en nuestro círculo para rendir culto a la imagen y a las personas, sino para honrar el hecho de ser portadoras de sabidurías ancestrales y ponerlas al servicio nuestro y de quienes las necesitan".