Por su encanto natural y sobrenatural, la península de Shāndōng (山东), en la costa nororiental de China, ha entrado en la leyenda. Su paisaje cautivador –una llanura aluvial regada por ríos y manantiales subterráneos, coronada por picos de granito y enmarcada por un litoral salvaje– solo puede fascinar. • Subir a Tài Shān, la montaña sagrada del taoísmo.
• Relajarse en Qīngdǎo junto al mar con la cerveza más famosa de China.
• Visitar Qūfù, la cuna de Confucio.
Incluye: Jǐ'nán, Zhūjiāyù, Tài'ān, Tài Shān, Qūfù, Zōuchéng, Qīngdǎo, Láo Shān, Yāntái y Pénglái.