¿Para qué me sirve tener una fe que no me lleva a descansar en ella toda mi vida depositándola en ese Dios en el que creo?
Si yo creo en toda esa omnipotencia, tengo que descansar en ella. Y solamente puedo descansar en la omnipotencia de Dios si confío en Dios. Y únicamente esa confianza es la que nos va a llevar al descanso, ¡hay que abandonarse!