Todo el mundo sabe que Katherine Mansfield pasó sus últimos días en el Instituto Gurdjieff en Fontainebleau", asegura Orage, autor de esta gran entrevista. "Tuve muchas conversaciones con Katherine sobre este tema durante los años de nuestra relación y, en particular, durante los meses que precedieron a su muerte. Solía decir: ́Supongamos que lograra escribir tan bien como Shakespeare. Sería encantador, y ¿luego qué? Algo le falta al arte literario, aun en su forma más alta. ¡La literatura no basta! ́. Éste es un testimonio invaluable de dos grandes escritores, que no sólo buscaron la excelencia en su arte, sino en el sentido profundo de la vida.