Una VID se planta únicamente por su fruto. Hay muchos tipos de vides, cada una con su tipo diferente de fruto. Cuando un agricultor planta una vid o un viñedo, selecciona ese tipo especial del cual desea obtener el fruto. El fruto será la manifestación de su propósito. Cuando Dios plantó la Vid Celestial, fue para que su fruto diera vida y fortaleza a los hombres moribundos. La misma vida de Dios, que el hombre había perdido por la caída, debía ser devuelta por Cristo desde el cielo; Cristo debía ser para los hombres el Verdadero Árbol de la Vida. En Él, lo Verdadero, la Vid Celestial, en Su Palabra y obra, en Su vida y muerte, la vida de Dios fue llevada al alcance de los hombres; todos los que comieran del fruto vivirían para siempre.Aún más maravilloso es que los discípulos de Cristo no solo deben comer y vivir sino que a su vez, se vuelven ramas frutales. La vida Divina que entra en ellos no solo debe morar en ellos, sino afirmar así su poder vivificador que debe mostrarse en el fruto que ellos tienen para sus semejantes. Tan verdaderamente como la Vid Celestial, todas sus ramas reciben la vida de Dios.
Religion og spiritualitet