Elena G. de White (1827-1915) es considerada la autora norteamericana más traducida. Sus obras han sido publicadas en 140 idiomas. Aunque su educación formal concluyó a los 9 años, escribió más de 100.000 páginas sobre una gran variedad de temas. Guiada por el Espíritu Santo, siempre exaltó a Jesús y señaló las Escrituras como el fundamento de su fe.