«Recordar aquel verano es como volver la vista al paraíso antes de pasar una puerta que lo dejará atrás para siempre.»
Para Nora, una niña de doce años, ir los domingos al lago, un lugar muy hermoso y tranquilo de colores cambiantes, es una experiencia deliciosa. Excepto Quim, que tiene siete años, todos en el grupo que la acompaña son adultos. Cada uno de ellos alberga en su interior sus propios anhelos, y ella los observa y no siempre cree entenderlos, pero la última mañana en el lago, a raíz de un conflicto entre los mayores y de la osadía de Quim, Nora despertará repentinamente del sueño de la infancia.
La nueva obra de Maria Barbal después del reconocimiento internacional a Tándem es una novela de gran intensidad emocional sobre la nostalgia, la belleza, el paso del tiempo y el significado de la felicidad.