Hace muchos siglos, desde los tiempos de los españoles, el tesoro del cacique Tisquesusa se encuentra perdido. Nopchivane, muisca antiguo, devela su misterio en las entrañas de la Bogotá del siglo XXI a un criollo de origen hispánico. No está constituido solamente por lo que todos imaginan, es más etéreo, incorpóreo e importante.