Los próceres y las personalidades de Roma no eran distintos del común de los mortales. César fue un mujeriego toda su vida y se avergonzaba de su calvicie, pero eso no desmerece su grandeza militar y estadista. Augusto no dedicó todo su tiempo a organizar el Imperio, sino que parte del mismo lo ocupó en combatir la colitis y los reumatismos...
Reseña:
«Haciendo un relato del pasado para quienes lo ignoran y para quienes ya lo conocen, Montanelli enseñó los grandes sucesos de la historia a varias generaciones, y lo continúa haciendo hoy.»
Luigi Mascheroni, Il Giornale
Indro Montanelli (Fucecchio, 1909-Milán, 2001), ejerció los oficios más diversos tras licenciarse en derecho y ciencias sociales: desde pescador de bacalao en Noruega hasta militar en Eritrea, pasando por granjero en Canadá. Ingresó como periodista en Il Corriere della Sera, periódico que lo envió como corresponsal de guerra a diversos frentes, entreellos el de la guerra civil española. Al margen de su producción de tipo periodístico ( Personajes, Gente cualquiera), su producción abunda en obras de corte histórico como El buen hombre de Mussolini (1947), El general de la Rovère (1959) (llevada al cine por V. de Sica), Historia de Roma, Historia de los griegos, Historia de la Edad Media, La Italia de la Contrarreforma, Dante y su siglo, Italiaen camisa negra, La Italia lictoria, La Italia del Eje, Corriente alterna, o Los sueños mueren de madrugada, obras todas ellas en las que Montanelli evoca con gran amenidad la circunstancia humana de muchos personajes y hechos históricos. En 1979 se publicaron sus Crónicas de guerra, resumen de su corresponsalía durante la Segunda Guerra Mundial.