Jalalpa el Grande es una zona vulnerable de la Ciudad de México
vecina de Santa Fe. El contraste es evidente y doloroso. Sin embargo, desde
el año 2005 existe un lugar en el que los habitantes de Jalalpa encuentran un
espacio donde su realidad se transforma y surgen oportunidades que antes
eran impensables: crecer y aprender, ser comprendido y cuidado, apreciado
y bienvenido: el Centro Comunitario Santa Fe. En octubre del 2012 inicié
ahí, con un grupo de mujeres que van de los 27 a los 81 años, el taller
“La Aventura de Escribir”.
Cuando conocí a mis alumnas les parecía casi imposible redactar una
frase y por si eso fuera poco, yo nunca había dado clases. Ellas me hicieron
maestra y estaré eternamente agradecida. Desde entonces, hemos creado
un vínculo entrañable a través de lo que nos une: el deseo y la necesidad de
narrar lo que cada una lleva dentro, el amor por la palabra.
Mis señoras, como les digo con todo respeto y cariño, son personas
valientes, admirables, entusiastas, sin prejuicios, con una creatividad
desbordada y muchas ganas de aprender. Nada las detiene a pesar de que
sus condiciones de vida son un reto constante. A veces hacen la tarea de
madrugada después de sus múltiples quehaceres; otras sobre las piernas
en el transporte público, algunas justo antes de entrar a clase, pero siempre
cumplen. También se da la magia de que hijos y nietos corrijan ortografía y
manden los textos por correo electrónico.
La Aventura de Escribir ha permeado en los familiares que se sienten
orgullosos de que sus abuelas, madres o esposas escriban esas historias que
surgen del fondo del alma. Cada cuaderno es un universo de vivencias y
sentimientos narrados con espontaneidad y sin tapujos.
Gracias Irene, Ángela, Sofía, Montse, María Luisa, Lupita, Juliana,
Tere, Isabel, Estephanía, Andrea, Rosario, Angelina, Dora, Juanita, Alicia
y Rafaela por su confianza y lo mucho que me han enseñado. Gracias al
Centro Comunitario Santa Fe por brindarnos el espacio, la oportunidad y el
apoyo para alcanzar estos logros.
Es un privilegio presentarte, querido lector, estas páginas que
seguramente dejarán huella en tu corazón.