Ivan Batlle (Barcelona, 1978), aficionado al mundo del manga desde su llegada, escribió su propio blog (Fujiwara Tofu Shop), donde trataba las novedades niponas del mundo del videojuego. Su interés por Japón lo llevó a cursar estudios de japonés en Tokio, en donde conoció a su pareja y coautora de este libro. Ester Ribó (La Seu d'Urgell, 1983), quien tras cursar estudios en la rama sanitaria, redescubrió su pasión por la cultura nipona. Este es su primer libro, nacido del amor que profesa por el arte japonés, en toda su expresión.