Solo
por ello esta película ya supone un hito en la
historia reciente del cine, pero aún acumula más méritos, y entre
ellos no es el menor haber conseguido que Ridley Scott, antaño
director de culto y en aquel momento en horas bajas tras películas
como La teniente O'Neill o Tormenta blanca, enderezara
su carrera cinematográfica.
Scott,
apoyado por los avances tecnológicos y en sus conocimientos de
Historia del Arte, y ayudado por su núcleo duro de colaboradores (el
editor Pietro Scalia, el director de arte Arthur Max) y por un elenco
de actores que aúnan experiencia (Derek Jacobi, Richard Harris,
Oliver Reed) y pujanza (Joaquin Phoenix, Russell Crowe en su primera
colaboración con este director), no se limita a retomar la tradición
del epic, sino que la renueva profundamente con sus
aportaciones estéticas y visuales, y con un sabio aprovechamiento de
los nuevos colaboradores, en especial John Mathieson (director de
fotografía) y Lisa Gerrard (coautora de la música juntamente con
Hans Zimmer). Su Roma entronca así tanto con el imaginario
tradicional, producto de siglos de recreación pictórica y fílmica,
como con sus recreaciones futuristas de Blade Runner.
Una
película, además, que ha generado muchísima bibliografía no solo
en el ámbito cinematográfico, pues, a la manera de clásicos como
Espartaco (S. Kubrick), rápidamente fue leída como una
alegoría de los Estados Unidos (y de su imperio) a fines del siglo
XX, como sucintamente tratamos en nuestra propuesta de análisis de
esta película.
El lenguaje claro y
didáctico utilizado en el análisis de los textos fílmicos permite
una fácil comprensión de todos los aspectos de la película: desde
los datos contextuales, técnicos e históricos de la película,
pasando por el análisis textual pormenorizado de la misma atendiendo
especialmente a los diferentes recursos expresivos que la constituyen
(espacio, tiempo, planificación, movimientos de cámara, música,
diálogos, etc.), y, finalmente, las aproximaciones interpretativas
globales –aunque siempre apoyadas en el análisis textual previo– que el propio autor de la Guía propone.
Jesús Masiá Moreno es Licenciado en Filología Clásica por la Universitat de València y actualmente es profesor de Latín y Griego en el IES Federica Montseny de Burjassot. Ha publicado con diversas colaboraciones material didáctico sobre dichas materias, entre los que destacan El asno de oro, Historias de fantasmas y de misterio en la Antigüedad, Helénicas II y Textos griegos para Bachillerato.
En el campo cinematográfico, ha presentado ponencias sobre La caída del Imperio Romano (A. Mann, 1964), O brother (J. Coen, 2000) y Matrix (Hnos Wachowski, 1999) en cursos de formación del profesorado.