Soy el fuego de Dios

José Kentenich

Dec 2023 · Nueva Patris

About this ebook

"Para la preparación del Tercer Mileno, el papa Juan Pablo II convocó a la Iglesia universal a celebrar un año dedicado al Espíritu Santo. El presente libro responde a ese llamado. Contiene una cuidadosa selección de textos sobre el Espíritu Santo tomados de retiros, homiías y conferencias del padre José Kentenich, fundador del Movimiento de Schoenstatt. Son escritos de rico contenido espiritual, orientados a despertar y fomentar en nuestra alma un profundo vínculo personal con el Espíritu del Señor. Poseen la lozanía de la palabra dirigida a la vida, fruto de una honda experiencia religiosa, palabra a la vez, dicha para el hombre actual. La presencia y acción de Espíritu Santo no deben quedar solo en la conmemoración del Pentecostés histórico. El Espíritu Santo está vivo, el actúa también hoy, en nuestro tiempo, en la Iglesia, en cada uno de nosotros. Hoy su presencia es más imperiosa que nunca. Por eso nos reunimos junto a María, como lo hicieran los apóstoles, para invocar su venida, para experimentar 'un nuevo Pentecostés' del cual debe surgir una humanidad renovada, una auténtica 'civliización del amor' con los rasgos de Cristo y animada por su Espíritu".

About the author

Nacido en Alemania, José Kentenich (1885-1968) desde pequeño tuvo una gran cercanía a la Sma. Virgen María. Ingresó a la Congregación de los Padres Palotinos siendo ordenado sacerdote en 1910. Desde 1912 trabajó como director espiritual en el Seminario Menor en Schoenstatt-Vallendar, donde se pone de manifiesto que el P. Kentenich es un educador talentoso, logrando entusiasmar a sus alumnos y contagiando en ellos su amor a María. Junto con algunos alumnos, el 18 de octubre de 1914 sella una Alianza con María, la “Alianza de Amor” en una pequeña capilla, que hoy es lugar de origen de un movimiento internacional de hombres y mujeres, de niños y jóvenes, de familias y sacerdotes. Existen alrededor de 200 Santuarios de Schoenstatt en más de 30 países del mundo. Entre 1941 y 1945 el P. Kentenich es prisionero de los nacionalsocialistas, primeramente en la cárcel de Coblenza, y luego en el campo de concentración de Dachau. En ese lugar el P. Kentenich ayudó a que muchos prisioneros experimentaran una gran cercanía de Dios a pesar del horror que vivían. Entre 1947 y 1948 el P. Kentenich inicia sus viajes hacia Sudamérica, África y los EEUU, para cultivar contactos internacionales y ayudar a los schoenstattianos de esos países a construir el Movimiento. En el período que va de 1951 a 1965, la Iglesia separó al P. Kentenich de su Obra, asignándole la ciudad de Milwaukee como lugar de residencia. Las autoridades eclesiásticas competentes examinaron su persona y su fundación, pudiendo volver en 1965 a trabajar los últimos años de su vida de lleno en la cuna del movimiento de Schoenstatt.