Tirada en el suelo de una mansión inglesa, golpeada y desvalida, Rorik halló a una dama de exquisita belleza, y no fue capaz de dejarla allí a merced de su violento marido, o para que la encontraran la banda de vikingos invasores que se acercaba. Así que decidió llevársela en su barco. ¿Pero cuáles eran las intenciones de Rorik, salvarla o quedársela?Yvaine desconfiaba de su guerrero salvador. Aunque le curaba las heridas y la protegía de sus hombres, lo cierto era que la tenía cautiva, y no tardaría en darse cuenta de cuál era el pago que Rorik buscaba como recompensa por sus cuidados…