┬лUn gobierno latinoamericano puede lanzar a su maquinaria diplom├бtica al rescate de un militar acusado de torturador o genocida, que de pronto es atrapado en una visita c├бndida a Europa, o fletar un avi├│n para regresarlo a su patria, pero no hace absolutamente nada para repatriar (y emplear) a miles de sus cient├нficos exiliados en el Primer Mundo. Por supuesto, esto se debe al simple hecho de que esos gobiernos saben muy bien para qu├й sirven los torturadores y los genocidas, y tienen un papel social para ellos, pero no tienen la menor idea de qu├й es un cient├нfico, ni c├│mo ensamblarlo a los engranajes de su sociedad. Estos pa├нses pueden tener a lo sumo un poco de investigaci├│n como tienen tigres de Bengala en su zool├│gico, pero de ninguna manera tienen ciencia.тАЭ
Marcelino Cereijido es Doctor en Medicina (Universidad de Buenos Aires) y profesor de Fisiolog├нa Celular y Molecular del Centro de Investigaciones y Estudios Avanzados de M├йxico. Ha publicado cientos de art├нculos y una docena de libros, tanto especializados en esos temas como de ensayo y divulgaci├│n sobre los desequilibrios, el tiempo, la muerte y la relaci├│n ciencia-sociedad.