No es fácil ser el menor de siete hijos en una familia de hechiceros infames, sobre todo para Ayden Dracre. En un mundo donde los hechiceros solo practican la magia oscura y los magos la magia de la luz, Ayden tiene un problema: es muy malo siendo malvado. Por mucho que lo intente, todos los hechizos que lanza para desatar el caos salen mal. Cuando descubre que su familia está harta de sus errores, decide hacerse cargo de su destino.
Tiene una sola oportunidad para demostrar a su familia que merece el título de hechicero o sufrirá la ira de su madre. Para ello, debe derrotar al mago más poderoso de toda la tierra. Solo hay dos problemas: no sabe cómo luchar con magia y no quiere herir a nadie. Si quiere sobrevivir a esta misión, tendrá que confiar en los aliados más insólitos.