Íñigo López de Mendoza, el Marqués de Santillana (Carrión de los Condes, Palencia, 1398-Guadalajara, 1458). España. Hijo de Diego Hurtado de Mendoza, almirante de Castilla. Su nombre original era Iñigo López de Mendoza. Perteneció a una de las más ilustres familias castellanas. Intervino en política; actuó en la corte del rey Juan II, del que en algunos momentos fue aliado y en otros enemigo; y participó en la conspiración que acabó con la caída y ejecución de don Álvaro de Luna. También en acciones contra los árabes y la nobleza levantisca (en Olmedo, 1445), por lo que obtuvo los títulos de marqués de Santillana y conde del Real de Manzanares. Dominaba el italiano, el francés, el gallego y el catalán. En su castillo de Guadalajara tuvo su célebre biblioteca, hizo copiar numerosos manuscritos y financió la traducción de muchas obras. Se rodeó de algunas de las personas más cultas de su tiempo. Santillana escribió en prosa y verso. Su obra poética estuvo influida por la tradición lírica medieval y las nuevas ideas poéticas italianas.