Los acontecimientos de la “Granja Animal” suponen la existencia de una sociedad en decadencia, la degeneración del poder, la sustitución progresiva de la democracia por un régimen autoritario que va socavando la condición animal para “humanizarla”, esto es, llevándola a los vicios del dinero, el alcohol y el uso estrambótico de los bienes materiales. Todo esto acompañado de un régimen de represión y terror, capaz de contener cualquier nuevo rebelión.