Desde que la seductora Lily McNeil había aparecido en su hotel, la vida de Tony Romano ya había corrido peligro en dos ocasiones. Tony necesitaba un poco de ayuda para evitar que su hotel se viniera abajo y Lily tenía magníficas ideas al respecto. Pero la empresa de la familia de Lily no dejaba de presionarlo para que vendiera y la llegada de la joven resultaba demasiado sospechosa... ¿Quién podría haber imaginado que acostarse con el enemigo era lo mejor que podría haber hecho Tony? No tardaron en darse cuenta de que se necesitaban el uno al otro... dentro y fuera de la cama.