En 1953, el escritor uruguayo Enrique Amorim erigió un misterioso monumento en la frontera entre Uruguay y Argentina. El memorial tenía la forma de una lápida, y en su interior Amorim enterró un osario. El discurso inaugural y la correspondencia posterior sugieren que ahí yacían los restos de Federico García Lorca.
Este libro comienza con el enigma de este monumento y luego pasa al enigma del propio Amorim. Millonario pero comunista, escritor pero hacendado, homosexual pero casado, uruguayo pero argentino, Amorim fue cambiando de identidad para estar cerca de los artistas que amaba: un Neruda maltratador y egoísta, un Picasso heroico en el París de posguerra, un Borges en pleno descubrimiento de su universo literario, un Chaplin juguetón perseguido por el anticomunismo.
¿Qué es verdad en esta historia? ¿Qué creía Amorim que era verdad? O ¿qué quería hacernos creer que lo era? Toca al lector decidirlo. Aunque rigurosamente documentado, este libro cuenta la historia de un camaleón, y, a través de sus ojos, la crónica más inesperada del arte y la literatura del siglo xx.
Santiago Roncagliolo (Lima, 1975) escribe sobre el mal y el miedo jugando con el thriller, el noir y la comedia negra, desde la historia política hasta la experiencia cotidiana. Sus siete novelas se han publicado en todo el mundo hispano y han aparecido hasta en veinte idiomas. Abril rojo recibió el premio Alfaguara y el inglés Independent Prize of Foreign Fiction. La pena máxima fue finalista del premio francés Violeta Negra y ha sido llevada al cine, al igual que Pudor. Su última novela se titula Y líbranos del mal. También ha escrito una trilogía de historias reales sobre el siglo XX latinoamericano y libros para niños ganadores de premios como el Barco de Vapor peruano o el White Raven de la Biblioteca de Múnich. Como guionista, escribe series de televisión y películas para Estados Unidos, México, España, Brasil y Perú.