Una escritora consagrada que trabaja en sus memorias redescubre los viejos diarios de su primer año en Nueva York, a finales de la década de 1970. Recién salida de un pueblo de Minnesota, sin apenas dinero y con hambre de nuevas experiencias, se deslumbra por todo lo que le ofrece la ciudad: su primer amor, los esbozos de su primera novela, la escena literaria que se abre ante ella, y, sobre todo, la obsesión por su vecina, una mujer joven que cada noche entona extraños monólogos en su apartamento y que la protagonista anota febrilmente en sus cuadernos. Conforme estas confesiones se vuelven más perturbadoras, su interés por descubrir la verdad detrás de la puerta de al lado también se intensifica.
Cuarenta años después de aquello, esas notas y diarios sirven a la escritora para reflexionar sobre temas como el paso del tiempo, el deseo o el papel de la mujer en la sociedad, y para constatar que son los recuerdos del pasado los que en gran medida conforman quienes seremos en el futuro.
Entre la metaliteratura y el feminismo, entre el thriller psicológico y el bildungsroman, Siri Hustvedt vuelve a cuestionar nuestras relaciones con la realidad, la capacidad del arte para cambiar nuestra
percepción del mundo, los límites de la ficción y los enigmas de la personalidad y la memoria.