Pero en esta vida nada es para siempre, Lucía recibe una paliza de un cliente obsesionado con ella y decide cambiar de ciudad para que éste no la encuentre. Allí conocerá un alma pura: Fran; con el que sentirá una especial empatía desde el principio y éste sacará lo mejor que hay en ella.
Desde joven he escrito relatos eróticos. Recuerdo el primero, en ese cuento que escribí sobre un compañero de clase, una tímida y guapa chica que me atrapó. ¡Escribí este cuento en un Spectrum 128Kb + 2A y lo guardé en una cinta! Pero, lamentablemente lo perdí.
Ha pasado mucho tiempo desde entonces. Hoy escribo novelas eróticas historias mucho más complejas, pero siempre recordaré esta breve historia.
Si no me conoces, ¡deseo que disfrutes de mis historias y que te atrapen! Si es así, ¡sabes cuánto disfrutas leyéndolas!