Había tenido una hija con él, ¿pero podía aceptar la corona? Marissa nunca olvidaría la primera vez que vio al príncipe Hércules Xenakis... más un dios pagano que un hombre. Y no podía creer que un príncipe de verdad quisiera estar con ella. Aunque todo cambió cuando descubrió que estaba embarazada. Marissa se vio obligada a mantener el embarazo en secreto, convencida por los hombres de palacio de que el príncipe no quería volver a verla. Cuando volvieron a reunirse, años después, descubrió que Hércules era inocente y estaba decidido a convertirla en su esposa. Pero aquella historia de Cenicienta era solo por su heredera. ¿O no era así?