Así, el pequeño sale a un lugar donde viven pájaros banales, felinos que idolatran a los robots y que olvidan sus diferencias por el bien común, osos polares que pierden pelo bajo el calor de un volcán, mientras un gran monstruo de piedra le canta para que no haga erupción. De igual manera, se topa con gorilas que cosechan la tierra mientras cuentan historias de terror sobre los lobos que habitan en el bosque y con delfines que rondan las antiguas ciudades, alcanzadas por el mar, tratando de entender nuestra medicina, nuestros libros y hasta durmiendo en las que eran nuestras camas.
Acompañado de un fiel cuervo y de los muy borrosos recuerdos de su padre, quien le habla a través de sueños, Toffee intentará cumplir su misión.
José Manuel Araquistain Hernández (San Miguel de Allende, Guanajuato, 1983). Cirujano oftalmólogo, con alta especialidad en Retina. Casado con Ana Luisa, padre de José María, Tomás y Lourdes. Fue ante las peticiones de estos niños que empezó a contarles historias todas las noches, y, además de algunos clásicos, comenzó la relectura de Michael Ende, Roal Dahl y Rudyard Kipling, entre otros.
Pero pronto las solicitudes se volvieron más precisas: «Papá, cuéntame un cuento sobre un robot»… Y así comenzaron las andanzas de Toffee.