El militar se había convertido en padre a tiempo completo... pero no en esposo. Como miembro de las Fuerzas Especiales de la Marina, Brock Sullivan vivía de acuerdo con su propio código de honor, un código que no le permitía ver cómo Jesse tenía que apañárselas sola estando embarazada. No tenía por qué ayudarla, pero decidió ofrecerle cierta seguridad mientras él estaba lejos luchando por su país. Jesse estaba dispuesta a hacer cualquier cosa por su hijo, incluso a renunciar a su sueño de encontrar el amor y convertirse en la esposa de conveniencia de Brock. Pero su marido volvió inesperadamente después de que lo hirieran en una batalla y lo que era un simple matrimonio de conveniencia empezó a convertirse en algo mucho más complicado...