Una chica desconocida
Sobre aquest llibre
¿Hasta dónde estarías dispuesto a llegar por ayudar a un desconocido?
Heidi Wood ve a una adolescente en el andén del tren, de pie bajo la lluvia, con un bebé en brazos. Sube al tren y se aleja. Pero no consigue quitarse a la chica de la cabeza. Heidi siempre ha sido una mujer caritativa: trabaja en una ONG, adopta gatos callejeros… Pero su marido y su hija quedan horrorizados cuando un buen día vuelve a casa con una joven llamada Willow y su bebé de cuatro meses. Aquella chica desaseada y sin hogar conocido podría ser una delincuente o algo peor. Pero, pese a las protestas de su familia, Heidi la invita a instalarse en su casa.
Durante los días siguientes, Heidi la ayuda a restablecerse. Sin embargo, cuando comienzan a aflorar pistas sobre el pasado de Willow, se verá obligada a decidir hasta dónde está dispuesta a llegar para ayudar a una desconocida. Y lo que comienza siendo un acto de bondad se convierte rápidamente en una trama mucho más retorcida de lo que nadie podía imaginar.
Este libro dará a los insomnes una razón para quedarse despiertos toda la noche.
Es un buen thriller psicológico, que está muy bien escrito y te entretiene y te atrapa hasta el final gracias a sus personajes. Recomendado a todos los amantes del thriller y de Mary Kubica.
Sueños entre letras
Una chica desconocida, tiene un inicio trepidante que enganchará a los lectores desde el principio. Gracias a sus capítulos cortos narrados por tres voces diferentes iremos conociendo la historia.
Sopa de letras
Giros, personajes misteriosos y un suspense completo es lo que se recibirá con la lectura de Una chica desconocida.
Abrir un libro
Los personajes que crea Mary Kubica siempre son redondos. Tienen una coherencia perfecta. No deja nada al azar, todo tiene una explicación... Hay una característica que me ha parecido maravillosa y es la pluma de la autora. Gracias a ésta la historia dota de una tono oscuro, siniestro... Sin llegar a ser terrorífico, pero si que lo plasma todo de un filtro misterioso.
Tarde de leer
