Juan Zorraquín tiene un oído sensible, finísimo, capaz de trasladarlo a sus cuentos, de forma que nosotros, sus lectores, también escuchemos el eco lejano de Sarmiento, del determinismo climático (el calor de la pampa vuelve taciturno al gaucho), de la tensión entre civilización y barbarie; pero también el clima agobiante de La inundación, de Martínez Estrada (personajes “capaces de los mayores excesos”); y luego, quizás a través de Borges, de las tormentas anglosajonas (Melville), para volverse, ya más cercano, eco del materialismo brutal de Fogwill, a su vez eco de la sexualidad igualmente brutal de Osvaldo Lamborghini.
El arte de Juan Zorraquín reside en hacer equilibrio en la punta de ese iceberg, sin por eso abrumar sus cuentos de citas o mensajes en clave; sino al contrario, con la naturalidad y la sencillez de quien se sabe perteneciente a una larga herencia.
Prólogo de Luis Chitarroni.
Juan Zorraquín nació en Buenos Aires en 1949. Es médico. Publicó la novela El fin de la corriente. Escribe habitualmente en diversos medios.