En este ensayo sorprendente, Timothy Morton aborda la cuestión de lo humano, su esencia, sus límites y diferencias respecto de los animales, los objetos y el mundo en general. El autor presta atención a fenómenos de violencia -producidos por el hombre pero que a la vez lo exceden- y al mismo tiempo hace una revisión crítica del ecologismo. Morton se propone una crítica radical del antropocentrismo y del humanismo, así como de la tradición filosófica que hace que la existencia del mundo dependa de la percepción y conceptualización del sujeto. 'Humanidad' supone una apuesta política muy interesante y arriesgada porque busca discutir, continuar y ampliar la tradición heredera de la obra de Marx. El autor de 'Hiperobjetos' introduce lo «no-humano» en el humanismo tradicional. Y aquí por «no-humano» se entiende no sólo a los animales y las plantas sino también a fenómenos menos estudiados por la antropología, como el calentamiento global, los virus o las sustancias radioactivas. Morton se pregunta: ¿cómo definir la vida? ¿A qué distancia de lo no-vivo se la debe colocar? Y pone en diálogo una serie de conceptos de la discusión contemporánea: «fantasma», «especie» y «comunidad», entre otros. Con una prosa muy entretenida y filtrada por la cultura pop busca socavar la oposición entre lo humano y lo no-humano, con alusiones permanentes a la cultura contemporánea, porque es un filósofo que escapa de lo estrictamente académico. La idea de este libro no es simplemente una revisión del marxismo sino una utilización de ese marco para llegar a lo que se plantea en el subtítulo: se trata de ver qué hay en común o qué solidaridad es posible. Por lo tanto también hay una intervención en los debates sobre las formas de asociación que no estén basadas en la identidad (por ejemplo: en el unirse por ser iguales, por ser de clase trabajadora o por ser mujeres). La apuesta de Morton tiene que ver con asumir que la solidaridad se lleva a cabo por la decisión ética y política de negarse a colaborar con la acción capitalista de contrarrestar la lógica solidaria. En este cruce entre materialismo y ecologismo, Morton propone una nueva «ola» de pensamiento y activismo ecológico utilizando las armas del pensamiento para construir sistemas de solidaridad y para abrir el futuro-presente. 'Humanidad' busca diseñar un discurso que en el siglo XXI ocupe el lugar, la potencia política y utópica que tuvo el marxismo dos siglos antes.